Ventajas de ser el primero
Banco creado desde cero en menos de 12 meses
Un banco centrado en el cliente
Las mejores prestaciones y funciones en su clase
Un banco a prueba de futuro que se puede escalar infinitamente
Un despliegue SaaS ejecutado en AWS Cloud
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En Rumanía existe una gran demanda de productos financieros digitales. La banca online está en auge y el 59 % de la población utiliza pagos sin contacto.https://www.statista.com/statistics/1114099/romania-payment-methods-during-covid-19/
- Con la ayuda de GFT y Engine by Starling nace Salt Bank, el primer neobanco digital nativo de Rumanía creado desde cero.
- Como su propio nombre indica, '"Salt"', la misión de Salt Bank es clara: llevar a sus clientes a dar el salto a la banca digital para abrir una nueva era en el sector financiero de Rumanía y también de la Unión Europea.
El reto
Crear un banco digital desde cero en menos de un año
Salt Bank es una filial de Banca Transylvania, el mayor banco del sudeste de Europa. En calidad de challenger, Salt buscaba entrar disruptivamente en el mercado convirtiéndose en el primer banco digital "app-first" de Rumanía y ofreciendo una experiencia al cliente totalmente novedosa. El objetivo era combinar la agilidad y la capacidad de innovación de una FinTech moderna con la seguridad y la estabilidad de un banco regulado.
Con un mercado potencial de hasta 20 millones de clientes en Rumanía, Salt Bank necesitaba hacer realidad su visión de construir desde cero un nuevo banco que resultara atractivo para una amplia variedad de grupos objetivo. Tras confeccionar un exhaustivo plan de negocio, la entidad necesitaba encontrar socios competentes que le permitieran acelerar el proceso, mitigar el riesgo y lanzar un banco digital de amplia funcionalidad. En este contexto, la visión estratégica de GFT sobre el mercado de las tecnologías bancarias coincidía con la de Salt: que los bancos pueden reunir rápidamente a partir de plataformas sectoriales ya existentes las capacidades necesarias para proporcionar “as-a-service”, una experiencia del cliente excepcional.
A la vista del rápido crecimiento experimentado por el mercado de la banca digital en el Reino Unido’, Salt Bank eligió Engine by Starling como su plataforma de core bancario. Engine había demostrado su eficacia en Reino Unido como motor tecnológico del exitoso e innovador Starling Bank’, aunque, naturalmente, iba a ser necesario adaptar la plataforma a los requisitos específicos del mercado rumano. Además, Salt Bank necesitaba lanzar el nuevo banco en el plazo de un año a más tardar.
Para cumplir esta ambiciosa fecha de entrega, Salt Bank necesitaba un socio tecnológico experimentado y de confianza que fuera capaz de dirigir el proyecto a buen ritmo. GFT contaba con las credenciales adecuadas, tras haber creado desde cero varios bancos digitales de éxito en todo el mundo. Un profundo conocimiento del sector, capacidades de integración de plataformas y una dilatada experiencia lo convertían en el socio ideal para ayudar a Salt Bank a diseñar las operaciones y procesos del nuevo banco.
“Teníamos claro que queríamos transformar la forma en la que la gente utiliza los servicios bancarios en Rumanía, pero necesitábamos un socio capaz de hacer realidad esta visión.”
El compromiso
Un banco nativo con amplias funciones
GFT confeccionó, junto con Salt Bank, una especificación funcional detallada y un plan de implementación para lanzar el nuevo banco en un plazo de 12 meses, una velocidad sin precedentes. Con la ambición de captar decenas de miles de clientes en el primer año y llegar a millones en el medio plazo, la experiencia del cliente, la seguridad y la escalabilidad fueron aspectos fundamentales del proyecto.
Para impulsar la captación de clientes desde el minuto uno, Salt Bank lanzó una campaña de preinscripción un mes antes del lanzamiento oficial de la entidad. En esta campaña se animaba a los clientes a registrarse de forma temprana para poder disfrutar de la categoría de ‘fundadores’ y acceder así a múltiples ventajas. La CEO de Salt Bank, Gabriela Nistor, mostró su plena confianza en la viabilidad del proyecto dentro del plazo establecido convirtiéndose en octubre de 2023 en la primera clienta del banco.
Fieles a la estrategia de acelerar el proceso utilizando soluciones prediseñadas ya existentes, Salt Bank optó por lanzar el nuevo banco como un software como servicio (SaaS) en una cloud privada utilizando el conjunto de herramientas y servicios AWS en todos los ámbitos. El profundo conocimiento del sector por parte de GFT, sus capacidades de integración y su elevada competencia técnica en materia de seguridad en la nube fueron cruciales. GFT entró en el proyecto para dirigir el desarrollo, configurar una plataforma en la nube específica para Salt Bank y estructurar el ecosistema del banco mediante la integración de soluciones especializadas de terceros, entre ellas la plataforma de core bancario y las capacidades de procesamiento de Engine.
GFT diseñó una experiencia de cliente basada en app conforme a los valores de marca de Salt Bank y a su promesa de ofrecer un servicio de banca digital innovador, rápido y práctico. El desarrollo de la nueva app tomó como referencia las mejores prácticas empleadas por Starling Bank, líder del sector en el Reino Unido. En este contexto, se incorporaron las últimas tecnologías de reconocimiento facial y documental a fin de garantizar un proceso de onboarding fácil, rápido y seguro que genere una excelente primera impresión y, por tanto, reduzca la probabilidad de abandono del proceso de registro.
Otro atractivo único de la propuesta de Salt Bank era que, a diferencia de otros neobancos, era capaz de ofrecer de entrada servicios multidivisa plenamente operativos. Aunque la plataforma de core bancario de Engine proporciona un banco habilitado para API con todos los servicios ya incorporados, fue necesario realizar importantes ajustes para poder desplegar la plataforma por primera vez fuera del mercado doméstico de Starling Bank, es decir, el Reino Unido.
“Queríamos seguir los exitosos pasos de Engine con Starling Bank en el Reino Unido, pero necesitábamos la tecnología y los conocimientos prácticos de GFT para poder replicar este éxito en Rumanía.”
El beneficio
Excelencia recompensada: ¡100.000 nuevos clientes en 10 días!
Salt Bank inició sus operaciones apenas un año después de haberse puesto en marcha el proyecto. El nuevo banco minorista debutó con una cuenta corriente al 3 % de interés (para transacciones superiores a un determinado límite), compatibilidad con monederos digitales, depósitos a plazo fijo, una tarjeta multidivisa (compatible con 17 monedas diferentes) y una cuenta de ahorro.
Se mire por donde se mire, el lanzamiento de Salt Bank ha sido un éxito rotundo. El objetivo de captar 230.000 clientes hasta finales de 2024 se alcanzó prácticamente al mes de su lanzamiento, con 200.000 nuevos clientes registrados en tan solo un mes. La facilidad y la rapidez del proceso de onboarding, que implica menos de siete minutos de media para abrir una cuenta, han contribuido a este éxito. Tras el lanzamiento, los sistemas fueron capaces de procesar sin problemas la avalancha sin precedentes de nuevos registros que se produjo a diario. Salt Bank se ha fijado como objetivo captar un millón de clientes en los tres primeros años de funcionamiento; los primeros datos indican, sin embargo, que es probable que este objetivo se alcance mucho antes.
El éxito de Salt Bank se debe a la integración exitosa de diferentes soluciones de plataforma líderes en el sector, todo un ejemplo de colaboración en plena era digital. GFT utilizó todas las capacidades de su modelo de entrega global a lo largo y ancho de 18 países para gestionar un proceso de diseño y despliegue altamente complejo. Con ello deja clara la necesidad de poseer una dilatada experiencia y unos profundos conocimientos del sector a la hora de crear un neobanco disruptivo realmente integrado.
Salt Bank’ demuestra que la banca digital es una nueva forma de hacer banca más inteligente y más sencilla. Pero el éxito no es un proceso estático, por lo que seguiremos innovando constantemente para mejorar la vida de las personas que viven en Rumanía.”
GFT continúa prestando soporte a Salt Bank, pero la estrategia conjunta es que el banco sea autosuficiente a medio plazo. Para lograrlo, GFT ha ayudado a Salt Bank a seleccionar, contratar y formar a un equipo de 50 expertos encargado de gestionar la nueva infraestructura. A medida que el banco vaya asumiendo una mayor parte del trabajo de desarrollo, GFT se irá retirando para asumir únicamente funciones de soporte técnico en caso necesario. GFT también estableció un sólido repositorio de mejores prácticas para futuros proyectos, además de ‘puntos de control’ para nuevos desarrollos destinados al entorno de producción.
GFT seguirá colaborando con Salt Bank en el desarrollo de nuevos servicios y productos destinados a retener y a captar más clientes, entre ellos, préstamos digitales, cuentas para pymes y productos de inversión. Salt Bank ha expresado ya su voluntad de apostar por cualquier innovación que permita mejorar el bienestar financiero de sus clientes.
Aunque Salt Bank quería ofrecer un nuevo banco ‘digital first’ en Rumanía con funciones de autoservicio y asistencia virtual integradas, pronto comprendió que parte del éxito de Starling Bank se debe a la atención al cliente personalizada que un equipo de personas ofrecen las 24 horas al día, 7 días a la semana. La filosofía de Salt Bank de poner al cliente en el centro requería, por tanto, un enfoque similar.
“GFT integró eficazmente en el mercado rumano todas las capacidades de nuestra avanzada plataforma para poder ofrecer productos bancarios altamente funcionales y personalizables, que además pueden desplegarse en todo el mundo por igual para captar unos volúmenes de clientes sin precedentes. El equipo de especialistas de GFT implementó con éxito la plataforma para aprovechar al máximo todas sus prestaciones.”
